El pasado miércoles 25 de octubre de 2017 visitamos el Archivo Histórico del Banco de España, actividad que fue guiada por las responsables María Inclán y Elena Serrano, a las que quiero agradecer el interesante recorrido que nos ofrecieron.
A través de esta visita pudimos conocer de primera mano esta joya arquitectónica y depósito de unos fondos documentales importantísimos para la cultura española.
El recorriendo comenzó por el ala original del edificio, que es el que transcurre paralelo al Paseo del Prado. En la planta baja nos detuvimos en el tramo del eje central, que corresponde a la entrada principal del monumento que desemboca en la imponente escalera de honor, realizada en mármol de Carrara. Este singular espacio está cubierto por una colorida vidriera -realizada por la empresa alemana Mayer- poblada con figuras alegóricas presidida por la Fortuna. ¡Una lástima que no dejaran hacer fotos y poder compartirlas! La puerta principal con la que conecta esta escalera solo se abre en momentos muy puntuales, como por ejemplo, para la entrada del Rey a actos oficiales.
En este punto las anfitrionas nos contaron la historia del edificio, que está dividida en cuatro capítulos principales correspondientes a sus sucesivas ampliaciones. Su evolución y desarrollo se llega a comprender muy bien gracias a la maqueta que se conserva del monumento en el propio monumento, toda una obra de arte, que María y Elena también nos enseñaron. La realización de la maqueta comenzó cerca de 1930, pero se concluyó hace pocos años, pues recoge todas las fases hasta el estado actual del Banco que hoy comprende toda la manzana. No obstante, en origen (año 1883) la sede se levantó en la calle de Alcalá con vuelta al Paseo del Prado, con arreglo al proyecto de los arquitectos Sainz de la Lastra y Eduardo Adaro, construido sobre el solar que ocupó el palacio del Marqués de Alcañices.
Después, en el año 1927, comenzó la primera ampliación por la calle de Alcalá, que se levantó sobre unas casas que pertenecían al conde de Santamarca. Esta ampliación se trazó a continuación del primer edificio, cuyo exterior sirvió para definir la fachada como una prolongación de la original con mínimas variaciones. Este segundo proyecto fue realizado por el arquitecto del Banco José Yarnoz Larrosa quien, si bien mantuvo la imagen externa del inmueble primitivo, en el interior empleó un lenguaje renovado acorde a la moda Art Decó. De este proyecto es el amplio patio de operaciones, cubierto con una vidriera que si bien sigue directrices clásicas, presenta un diseño geométrico y simplificado, propio de la tendencia modernista del momento.
La segunda ampliación de la sede comenzó en 1969, con un proyecto del hijo del autor de la anterior reforma, Javier Yarnoz Orcoyen. En esta fase, el edificio del Banco se cerró por las calles de los Madrazo y Marqués de Cubas. Por último, en 2003, se inició la cuarta fase del edificio del Banco de España madrileño, con el que se cerraba la manzana en el ángulo de la calle Alcalá con marqués de Cubas, con el proyecto de Rafael Moneo.
El Banco de España también custodia un rico patrimonio de bienes muebles, compuesto por esculturas, grabados, mobiliario, pinturas, etcétera. Una parte de él consiste en una serie de retratos de personalidades vinculadas al Banco realizados por Goya, cuadros que tuvimos la suerte de ver. Nos contaron que fue gracias a documentos del Archivo lo que dio pie a localizar e identificar la existencia de los mismos.
La visita continuó con el acceso a los espacios del Archivo Histórico, el cual tuvo como primer archivero nada menos que a Ceán Bermúdez (1749-1829), historiador del arte y coleccionista ilustrado. Los fondos que conserva el Archivo Histórico consisten en documentación relacionada con las actividades del Banco desde su fundación como Banco Nacional de San Carlos. Según queda recogido en su página web: “Los documentos que custodia son de una gran variedad y testimonian aspectos de la historia y actividades del Banco de España y de nuestra historia económica y financiera”.
Elena y María, así como el resto del equipo que se encontraba en el departamento, nos explicaron los últimos proyectos que han podido desarrollar, como la limpieza de un elevado número de ejemplares históricos que destacan por la diversidad de las encuadernaciones, “tema que daría para varias tesis doctorales”. Dado que el Archivo se abrió al público en 1982, es un lugar ideal para desarrollar diversas investigaciones.
El depósito está ubicado en un nivel más bajo y dotado con un alto nivel de seguridad y modernas instalaciones. Entre ellas destacan unos planeros y armarios para fotografías recién instalados que han sido hechos a medida. Entre varios documentos de gran interés, nos mostraron un álbum que recoge imágenes de la sede del Banco de España de Teruel tras la Guerra Civil, edificio que quedó prácticamente destruido por las bombas.
En nuestra visita pudimos conocer una parte muy importante del Archivo del Banco de España en Madrid, pero no la única. Hay otras estancias del edificio que albergan otros fondos del archivo histórico y del general de la institución, por lo que el volumen –y en gran medida la riqueza- de este patrimonio es ingente.
Esta visita ha supuesto para mi un emocionante momento, además de por lo expuesto hasta aquí, porque mi bisabuela fue la primera generación de mujeres que trabajó en el Banco de España; así que a ella le dedico este texto.
Archivo Histórico del Banco de España
Calle Alcalá, 48, 28014 Madrid
La entrada Visita SEDIC al Archivo del Banco de España de Madrid. De depósito de dinero a depósito de patrimonio documental se publicó primero en SEDIC - Blog.